Foto: La Voz de Rusia
Pese a la distancia que separa los dos
Estados, ambos documentos tienen mucho en común: las Fuerzas Armadas
serán orientadas principalmente a las campañas militares realizadas en
otras partes del mundo y se prestará una especial atención a los
acontecimientos en la región Asia-Pacífico.
Economía como factor de importancia estratégica
La
escasa estabilidad económica a nivel mundial se ha tomado en
consideración en ambos documentos. En el Libro Blanco francés se
menciona la influencia de la crisis económica global que puede minar la
estabilidad financiera y política del mundo occidental. Al mismo tiempo,
se subraya que el crecimiento económico de determinados países en vías
del desarrollo, en primer lugar, Brasil, la India y China, podría
convertirse en un factor que haga aumentar su peso político. En el
informe australiano la crisis figura entre los principales aspectos que
definen la planificación estratégica.
En estas
condiciones no pudo menos de tomarse en consideración el aumento de las
actividades económicas y políticas en la región asiática. De modo que
las discrepancias políticas y posibles conflictos en la región
Asia-Pacífico son consideradas por ambos países factores
desestabilizantes.
Australia, debido a su cercanía a la
zona, se toma las mencionadas amenazas de una forma muy seria. A
diferencia de la doctrina francesa, en la australiana se indica
inequívocamente que la defensa del territorio nacional representa uno de
los posibles objetivos de las Fuerzas Armadas. Mientras tanto, para
Francia, este factor es menos relevante y el informe subraya una escasa
posibilidad de conflictos armados en Europa.
Relaciones con Rusia
Rusia
es mencionada en ambos documentos como un importante actor geopolítico.
El informe francés llama la atención hacia el crecimiento de los gastos
militares de la Federación Rusa. Se llega a la conclusión de que las
Fuerzas Armadas rusas tendrán unas posibilidades más amplias y se hace
constar al mismo tiempo la existencia de discrepancias entre Moscú y la
OTAN en una serie de asuntos, entre ellos, el sistema de defensa
antimisiles, la seguridad internacional y la seguridad energética. Se
subrayan los aspectos positivos de la cooperación con Rusia en el
transporte de cargas a Afganistán, la operación en Malí y la cooperación
técnico-militar entre Moscú y París. Las relaciones entre Rusia y la
OTAN se han calificado de “equilibrio inestable” y se ha expresado la
esperanza de que el statu quo se mantenga. Se subrayó también la necesidad de cooperar con Rusia en materia de la seguridad europea.
El
documento indica también que la situación económica de Rusia sigue
siendo muy inestable y que la dependencia de la exportación de
hidrocarburos podría afectar a la realización de los programas militares
de Moscú.
Se ha señalado también que la reducción del
gasto militar por parte de la OTAN complica el estado de las cosas para
la industria militar y agrava la competencia en el mercado mundial de
armamentos, donde aumenta el papel de ciertos países, entre ellos,
Estados Unidos y Rusia.
La importancia de Rusia como
exportadora de armamento e hidrocarburos se subraya también en la
doctrina australiana, señalándose al mismo tiempo el creciente potencial
económico del país, un posible factor de influencia.
China y otros países
La
rivalidad entre EEUU y China, los actores más importantes de la región y
del mundo, se califica en el informe australiano como un factor que
determina la situación global. China no es calificada como “posible
rival”, pero, dadas las relaciones de Australia con otros países, no
queda lugar a dudas. Francia en su informe pone atención además en las
regiones clave del Norte de África y Oriente Próximo, indicando que es
posible una desestabilización de la situación y amenazas terroristas.
El nuevo modelo de guerra
Ni
Francia ni Alemania se preparan para la clásica guerra terrestre. Se
apuesta por el desarrollo de las fuerzas de despliegue rápido, la Marina
de Guerra y las Fuerzas Aéreas. En ambos documentos se indica el
importante papel de las unidades de misiones especiales y la necesidad
de reforzarlas, y se planea desarrollar las fuerzas de soporte en la
retaguardia y de abastecimiento de unidades de combate.
Ambos
países apuestan por el desarrollo de la aviación de combate, armas
modernas de alta precisión, vehículos aéreos no tripulados y los medios
de control y comunicación, haciendo del Ejército de Tierra brigadas
móviles conjuntas.
Presenta interés la diferencia en
las actitudes francesa y australiana hacia las armas nucleares. Francia,
siendo una potencia nuclear, mantiene su arsenal como garantía de la
estabilidad estratégica, mientras que Australia que no dispone de armas
nucleares anuncia que percibe a EEUU en calidad de garante contra el
posible uso de este tipo de arsenales.
La voz de Rusia
No hay comentarios:
Publicar un comentario