Rusia ha desarrollado un pequeño radar para constrarrestar el terrorismo aéreo. El novedoso equipo, diseñado por especialistas en sistemas de radiotécnica e informática del consorcio RTI, no tiene análogos en el mundo.
Se llama “Marmota”, tiene largo
alcance y es capaz de realizar el control permanente de la situación
aérea en la zona donde se encuentran instalaciones importantes.
Tal
vez, el nombre del aparato se deba a sus pequeños parámetros y a la
capacidad de su prototipo, la marmota, de predecir el tiempo. El radar
capta e identifica con facilidad cuaquier objeto aéreo que vuela a baja
altura, dice el portavoz de la empresa diseñadora, Konstantín
Poltoranin:
—Es un
equipo compacto, de fácil transporte. Su mayor ventaja es que capta una
amplia gama de objetivos, incluidos los drones, que no es una tarea
fácil, entre las que enfrenta hoy en día la defensa antiaérea. Es fácil
de instalar junto a cualquier edificio de interés público y capaz de
protegerlo con seguridad de ojos ajenos. No tiene análogos en el
exterior. Hay equipos parecidos en EEUU, Australia e Israel. Pero el
nuestro es más económico en términos de mantenimiento y muy funcional.
El
radar identifica con facilidad cualquier aparato aéreo a distancias
considerables de la instalación protegida, señala el analista militar
del diario Komsomolskaya Pravda, Víctor Baranets:
—Si
el blanco vuela a una altura de doscientos metros, el Marmota lo capta
sin problemas a doce kilómetros de distancia. Si la altura es de mil
metros, la distancia es de veinte kilómetros. Y si es de cinco mil
metros, el radar descubre el objetivo a cincuenta kilómetros de
distancia. Ningún otro equipo de radiolocalización en el mundo posee
similares características táctico-técnicas. A primera vista parecen casi
iguales, pero ninguno es equiparable con el Marmota por su grado de
precisión en la fijación del objetivo y su capacidad de contrarrestar
las radiointerferencias. Otra ventaja del Marmota es que puede funcionar
cincuenta mil horas consecutivas. Es un indicador muy alto.
Hay
también otro aspecto, agrega el experto. Rusia cuenta con muchas
instalaciones de interés estratégico. Plantas nucleares, fábricas de
defensa, presas, edificios de gobierno, estados mayores... Para
desplegar grandes radares en todos estos sitios, se precisarían enormes
inversiones. El Marmota, en cambio, es una opción segura, pero
económica.
—Cada
instalación estará provisto de su propio radar para controlar la
situación aérea, de manera segura, en un radio de 360º y durante las
venticuatro horas. Es un medio altamente eficaz para contrarrestar la
amenaza de terrorismo aéreo que es cada vez más fuerte. Por algo estamos
considerando el despliegue de misiles antiaéreos para proteger cada
instalación importante. Lo podemos hacer, pero si no tienen “ojos”, como
los del radar Marmota, difícilmente podrían funcionar bien en el
momento necesario.
La empresa diseñadora del
Marmota, el consorcio RTI, es líder reconocido en materia de
radiolocalización, y una de las cien compañías de defensa más
importantes del mundo. Es una de las pocas empresas militares rusas con
una alta participación de capital extranjero, lo cual le da agilidad
para desarrollar proyectos innovadores, tanto civiles, como militares.
Uno de estos proyectos tiene que ver con el desarrollo de equipos de
radiocomunicación para el helicóptero Ka-52, con base en el buque de la
clase “Mistral”.
La voz de Rusia
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