"Algunos de estos peregrinos eran anteriormente miembros de la Guardia Revolucionaria, y otros son militares en retiro", indicó Salehi al subrayar que ninguno de los rehenes en la actualidad está relacionado con las fuerzas de seguridad del país y que llegaron a Damasco, con el único propósito de visitar los lugares santos.
El sábado, 4 de agosto, en la carretera que conduce del aeropuerto internacional de Damasco, fueron secuestrados 48 peregrinos chiítas de Irán. El autobús en el que viajaban los iraníes, fue detenido en las afueras de la capital siria, en un puesto de control de los militantes. El lunes, medios de comunicación informaron que tres de los rehenes fueron asesinados.
El domingo en un vídeo difundido en YouTube se aseguró que los iraníes capturados no eran peregrinos sino miembros de la Guardia Revolucionaria de elite iraní que llegaron a Siria con una misión de inteligencia. El Ministerio de Exteriores de Irán negó el lunes la veracidad de este tipo de informes.
En una carta dirigida al Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, Salehi solicitó la cooperación de la ONU para la liberación de rehenes iraníes en Siria que se encuentran en manos del "Ejercito Libre Sirio".
Ria Novosti
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