El buque guardacostas Smetlivi clasificado por la OTAN como
destructor, perteneciente a la Flota del mar Negro de la Armada rusa,
abandonó este lunes el puerto sirio de Tartus para llevar a cabo una
serie de misiones frente a las costas de Siria, informó una fuente
militar.
Tras zarpar el pasado 1 de abril desde la base de Sebastopol, el
navío atracó tres días después en Tartus, donde Rusia mantiene una base
logística para operaciones navales y donde Smetlivi se reabasteció de
agua, combustible y víveres.
“A partir de ahora durante varias semanas, hasta principios de mayo,
la tripulación desarrollará misiones en la parte este del Mediterráneo,
cerca de las costas sirias”, señaló la fuente.
Según recordó, EEUU, Francia, Reino Unido, Alemania y otros países
reforzaron su presencia naval en esta zona ante el conflicto que sacude a
Siria desde hace más de un año.
Altos mandos de la Armada rusa defendieron en reiteradas ocasiones la
presencia de sus buques de guerra en el Mediterráneo, sector que forma
parte de la zona de responsabilidad de la Flota del mar Negro (FMN).
La Quinta Escuadra de la FMN mantuvo en esa zona hasta medio centenar
de buques de superficie y submarinos en los tiempos de la URSS. A día
de hoy, la FMN dispone del buque de reconocimiento Kildin en el
Mediterráneo y el petrolero Iman en Tartus, además del Smetlivi y el
buque taller PM-138 que también navega con rumbo a Siria.
El buque guardacostas Smetlivi del proyecto 01901 se incorporó a la
Armada en 1969 y fue sometido a una modernización en la década de 1990.
Desplaza 4.390 toneladas y desarrolla velocidades de hasta 34 nudos.
Tiene una autonomía de 3.500 millas y capacidad para una tripulación
de 266 personas. Está equipado con misiles de crucero Urán, sistemas de
misiles antiaéreos Volna, sistema artillero de 76,2 mm, lanzamisiles
RBU-600 y lanzatorpedos de 533 mm.
Fuente Ria Novosti
No hay comentarios:
Publicar un comentario