A pesar de que antes del jueves pasado el grupo GLONASS era incompleto, funcionaba con acierto durante varios años. Para cubrir el territorio de Rusia el sistema necesitaba 18 satélites. En esto, se garantizaba prácticamente la navegación ininterrumpida del 100 % en el país. Ahora GLONASS cubre todo el territorio mundial. De esta manera, es posible decir que Rusia se ha garantizado una soberanía navegacional. Es difícil sobrevalorar su importancia para el país, asevera Andrei Ionin, experto de la operadora de redes NIS-GLONASS.
Rusia puede conceder soberanía navegacional a otros países interesados en reducir los riesgos del uso único del sistema norteamericano. No es un secreto que EEUU, en caso necesario, pueden desconectar la señal de GPS en cualquier territorio. La existencia de un segundo sistema global disminuye sustancialmente los riesgos políticos de aquellos países que desean aminorarlos. Los estados que se consideran entes de política mundial, pueden firmar un acuerdo con Rusia y obtener independencia respecto de GPS norteamericano. GLONASS en rigor se transforma en un real instrumento político de Rusia, incluso en un instrumento geopolítico.
Nuestro grupo funcionaba antes, cuando el número de satélites conectados no llegaba al proyectado. Pero había pequeñas interrupciones en la determinación de coordenadas, porque el receptor debe “ver” simultáneamente 4 satélites, continúa Andrei Ionin.
Es cierto, admite el experto, que la determinación de coordenadas tan solo por los satélites rusos es necesaria tan solo para los militares. Al cliente común le conviene más el equipo bi-sistema pues para él no tiene importancia de quién recibe la señal el navegador: de GLONASS o de GPS. Con más razón porque el uso conjunto mejora la precisión de las coordenadas casi un 50 %, resalta Andrei Ionin.
En Moscú, desde 2013 se planifica equipar todo el transporte con dispositivos de Era-GLONASS. Estos funcionan con chips bi-sistema. Tras una avería del tráfico el aparato transmite sin demoras las coordenadas al operador. Su uso podrá salvar la vida de 3 mil personas anualmente. Además, los autobuses podrán transmitir datos sobre la llegada a la próxima parada. De este modo, las tecnologías satelitales de navegación mejorarán notablemente la calidad de vida de los ciudadanos.
fuente: La voz de rusia
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